Desde que inicié mi proceso de Catarsis, he tenido varios puntos centrales todos encaminados al amor propio, al realmente convertirme en un ser humano útil, en trascender, pero sobre todo en ponerme a mí por encima de todo. Este proceso es como caminar por una cuerda floja, porque que cuando deja uno de mirar para el lado "se mete al rancho" del vecino, sin querer queriendo.
Yo no sé si antes la gente escribía tanto como ahora, pero sí es un hecho que a uno le dan ganas, de ser bloguero, twitero, facebukero, y decirle al mundo con pelos y señales lo que uno piensa, enredo grande cuando
esas mismas personas en vivo y en directo no son capaces ni de saludar, el hecho de que el agresor sea un sudónimo en una red social muchas veces sin rostro le empodera, pero ese es otro rollo en el que no me quiero meter.
Definitivamente estas facilidades tecnológicas para opinar son todo un hit, pero como lamentablemente esto tiene un pelo grande en el arroz, al dar esa facilidad para escribir, opinar, crear, aconsejar, se tergiversa el asunto y se convierte en el criticar, despotricar, amenazar, acribillar a madrazos escritos al que escribió.
Hace poco la Doctora Albertina me contaba que su perrita se escapo mientras estaba al cuidado de su empleada, y dentro de sus publicaciones solicitando ayuda para encontrarla, recibió un sin número de ofensas "por que no la amarraba" "ahora no se queje ni llore la culpa es suya por descuidada". ¿Cómo es posible que uno no mida sus palabras?
El número de atacantes cibernéticos es bastante alto; por todo lado se leen críticas completamente destructivas, sin fundamenteo, sin alma, sin por un momento ponerse en los zapatos del otro.
Ahora bien, estar en desacuerdo con lo que opina el escribano es perfectamente válido. Pero el analizar desde que que óptica escribió es tan importante como el mismo escrito, juzgar a la dueña de la perrita porque su empleada la dejo salir argumentando que era mejor amarrarla es una chifladez.
El ciberacoso es una vaina muy berraca, y no me gustaría estar en el lugar de los personajes públicos que malo si miran pero peor si no, que si suben de peso, que si bajan ayyy no que horror. Recientemente escuchaba a una artista mexicana, (que no conozco, no puedo opinar de su persona) Pilar Montenegro que platicaba sobre su ausencia de los escenarios, y cómo un enfermedad neurológica que padece se ve agravada por la tensión que generan las redes sociales frente a sus publicaciones, al punto de abtenerse de realizar su actividad en aras de su salud, prefiere que no la acosen así sus nervios no se desbordan.
Hay varios puntos a analizar en esto del ataque a personas públicas, como lo expone Bernardo Stamateas en La Nación de Argentina, "En internet, quienes poseen baja estima suelen sentirse "iguales" al tener la posibilidad de insultar a un famoso, a una persona con autoridad, etc."
Y los ejemplos son bárbaros, el bochornoso acoso a la SUPERWOMAN (ese apelativo se lo puse yo, porque solo una super mujer hace lo que ella, mis respetos compita!!!!) Alexa Moreno, gimnasta olímpica, y en palabras del Universia de México: "Estas críticas no solo vinieron de usuarios de redes de
diferentes paises, sino incluso de compatriotas que no tardaron en poner etiquetas a la gimnasta y dudar de sus habilidades por su peso. Si bien muchas de las gimnastas que solemos ver en este tipo de competencias poseen figuras esbeltas y delgadas, la idea de que las atletas necesita verse de esta forma se corresponde con los ridículos estereotipos de hoy predominan en el mundo y nos alejan del verdadero concepto de belleza y naturaleza de los cuerpos."
El caso de los famosos es realmente una escuela de vida, son concientes que no pueden ni deben estar despegados del público y que las redes sociales les reportan seguidores, publicidad, dinero y por estas razones completamente lógicas y convenientes, aguantan cuanto ataque les llega y quiero creer que no es que se acostumbren a ser ofendidos, solo que saben que deben "Aguantar Vara" por el hecho de ser famosos. Una caso que incluso le twitee al respecto es mi admirada Margarita Rosa De Francisco a la que tienen como tajada de platano en la paila, le dan por un lado y le dan por el otro (también tiene muuchiiiiisimo apoyo) quien escribió una columna sobre los reinados de belleza y su vanalidad, (que lamentablemente ya no encontré) que si usted esta de acuerdo o no con lo que ella opina es completamente irrelevante, ella SÍ fue reina!!!!
Me ha sido inmensamente útil en el proceso de mejoramiento humano el quedarme callada frente a eventos que no interfieren conmigo, ni en lo más mínimo. CHISMES.
Nací dentro de una comunidad muy pequeña, La Palma Cundinamarca Colombia, el ser una sociedad tan cerrada nos dá inmensos beneficios, somos gente solidaria, con real gusto por ayuda al vecino, nuestras fiestas son una maravilla, sobran manos que te inviten a bailar, la felicidad polula en eventos sociales, a los que por supuesto todos estamos invitados, sea donde sea. Curiosamente la misma actitud que es tan buena en ciertas situaciones es inmensamente perjudicial en otras. El chisme pasa fronteras incluso lógicas, vivo fuera de la Palma hace mas de 20 años, y aún escucho comentarios negativos sobre mi persona que como dicen los mexicanos #NiAlCaso. Ya después les platico como viví el bulling en mi colegio, allá en mi pueblo cuando aún no se inventaba esa palabra.
Vale la pena leer el artículo del Science Daily donde exponen el resultado de un estudio antibullin: "Los estudiantes de las escuelas primarias que participaron en el programa contra la intimidación de tres meses en las escuelas de Seattle, mostraron una disminución del 72% en los chismes maliciosos. El estudio es el primero en mostrar que ampliamente utilizado programa de prevención de acoso STEPS TO RESPECT puede frenar los chismes de los niños, un elemento de la cultura de patio de recreo que a menudo se considera inofensivo pero es enteramente capaz de causar daño real."
El no poner atención a chismes ni mucho menos replicarlos, me a ha llevado a abstenerme de comentar (a no ser positivamente) en cuanta imagen, situacion, chime incluso politiqueria que no me atañe. (Eximo violencia animal o violencia sexual infantil, que ahí si parezco revendedora de abastos) Descubrí que es inmensamente útil alejarme de personas chismosas, que incluso cuando alguien muy cercano a mí comete un error o hace algo con lo que no estoy de acuerdo, reflexiono, me afecta? Es conmigo la cosa? Sirve para algo que me meta en eso?? Si la respuesta es NO, cierro mi piquito con candado y boto la llave.
Que si las kardashian se lo pusiero o no, a mi realmente no me interesa y nunca he comentado ni a favor ni en contra, que si los judios comen cerdo o no, pues yo no soy judía, no me importa, que si la vecina de La Palma va a tener su quinto hijo, pues yo no mantengo a ninguno de ellos, no me importa.
Parece un acto simple, pero no se imaginan lo que me ha costado cambiar un hábito social con el que nací, fue literalmente reprogramación cerebral. Y aunque a veces yo misma me descubro haciendo algún comentario sin sentido, al menos me doy cuenta... y nuevamente #CierroElPico
Ahora bien, es inherente que al exponer tu vida con una foto privada, un video, una opinión estás dando pie a la opinión pública. Pero si considero importante el que esos comentarios no solo tengan un deje de lógica, sino fundamentalmente del respeto.
Por otro lado hay que entender que "como uno dice una cosa dice otra" #ladychimoltrufia. Cuántas veces en el día nos contradecimos a nosotros mismos, cuantas veces se nos reta la propia lógica, ese reto a tu lógica si lo cuetionas, si cuestionas cada vez que te contradices, te vuelves loco.
Sería muy bueno ver cuantos cojones les salen a los que se la pasan criticando y juzgando si esa persona a la que atacan estuviera ahí, en vivo y en directo, a lo mejor ahí la cosa ya no sería tan "sincera". El truco como lo menciona la Revista SEMANA sería: "Tal vez deberíamos enseñar a los niños, niñas y adolecentes a conservar una actitud ética y tolerante, incluso cuando su identidad esté oculta en el ciberestacio y nadie los está viendo.
Por supuesto y como toda educación comienza en casa.
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